EL QUERUBÍN UN PRECIOSO APERITIVO

19 de Septiembre de 2013

¡¡Por fin ya es viernes!!

No hay nada mejor para quedar bien ante una visita no esperada que sacar en nada de tiempo un aperitivo elaborado en casa, caliente y muy bueno, aparte de aparente.  Los Querubines.

Apuntar lo que hay que comprar:

Baicon

Aceitunas sin hueso (con hueso son más indigestas)

Langostinos (de esos de 40 a 60 la caja, o sea tamaño medio)

Poquito de mantequilla o margarina

Un huevo (con perdón) o varios si vas a hacer mogollón para congelar.

Pan rayado

Antes de empezar cocer en agua con sal los langostinos 2 o 3 minutos y luego pelarlos

Cortar el baicon en tiras que puedan enrollarse fácilmente en el langostino.

Enrollar el baicon en el langostino y atravesar en un palillo.

Después en ese mismo palillo añadir la aceituna

Papá como veis hace muchísimos

Precalienta el horno a 250 º arriba y abajo

Después los pasa por huevo y pan rayado

Prepara una bandeja de horno con papel de hornear al que unta de mantequilla o margarina para evitar que se queden pegados los querubines.

Los tiene luego 6 minutos, les da la vuelta y los pone otros 6 minutos.

Los deja enfriar y luego los congela en bolsas de aproximadamente 25 unidades. Al congelador.

Vienen visitas, saca una bolsita y enciende el horno a máxima potencia y sin descongelar, los pasa por mantequilla y los mete durante 10 minutos, dándolos la vuelta a mitad del horneado.

Y ya está. Crujientes y divertidos.

Nota: Guillermo los llama Querubines, porqué pensaba hasta hace nada que eran los angelitos sin cuerpos que acompañaban a las pinturas de las Vírgenes. Hace unos días por primera vez miró en el RAE y en su definición no viene nada de eso.

La forma de lo que Guillermo  pensaba que era un Querubín y este aperitivo es muy similar.

A Guillermo no le importa y le seguirá llamando Querubín.

 Que os aproveche.